Fadi ha llegado al final del camino, su proceso de radicalización está a punto de culminar en un final que puede significar su desaparición física y una catástrofe desde el punto de vista de la seguridad pública. La tragedia está servida, pero algo le está ocurriendo: una voz interior le impide conducir en paz la furgoneta hacia su fatal destino. Un acontecimiento imprevisto en una gasolinera a partir del encuentro con una joven prostituta rumana abocará a la inusitada pareja a una huida en forma de road movie a través de buena parte de la geografía del estado. Al final del relato, el protagonista se dará cuenta de que, ni en su peripecia ni en la sala de interrogatorios en la que la historia nos está siendo revelada, las cosas son ni han sido nunca lo que parecían.
