Este libro es un coñazo y no pretende ser la polla. Porque no es lo mismo un fulano que una fulana ni un zorro que una zorra. Hablamos cada día, pero no somos conscientes de las trampas de nuestro idioma. Un lenguaje rico y basto que cuando alude a las mujeres y se refiere al femenino, se torna negativo. A través de este libro se pone en evidencia esta realidad, para intentar, desde una llamada de atención, cambiarla. Un libro de lectura rápida y divertida, que utilizando el ingenio, lanza un mensaje fundamental, el papel de la mujer en el lenguaje y por ende en nuestra sociedad. A través de rimas, adivinanzas, problemas matemáticos, sopas de letras e incluso del horóscopo, se pone el foco en nuestro idioma, con el que nos han educado y seguimos incorporando en nuestro día a día. Además, cuenta con la colaboración del artista contemporáneo Eugenio Merino. Un artista cuya obra es un ejemplo de que la crítica política y social más ácida, grave y actual se puede hacer a través de humor, el lenguaje satírico y la inteligencia. Este libro es un coñazo, es feminista, divertido, ingenioso y reivindicativo, porque décadas después de que naciese la Real Academia de la Lengua española, queda mucho por hacer. Y porque el humor y el lenguaje inteligente es la mejor herramienta para cambiar la sociedad.
