Plantear la existencia de «identidades complejas» en las sociedades de la modernidad tardía, que son multidimensionales, multiculturales, multiétnicas y multirreligiosas, no es una cuestión ideológica, sino que responde a una exigencia de la realidad impuesta por la globalización y las migraciones masivas. El mestizaje compone el ambiente de las ciudades y de las naciones en el ámbito de la cultura globalizada.