Dos hombres son condenados injustamente a ser galeotes en la España del siglo XVII. A partir de ahí, toda la peripecia escénica. Tiempo después, uno de ellos, ya triunfador, se enfrenta al recuerdo y a definir los principales valores de su vida. Va descubriendo que las mejores armas para superar el sufrimiento son la risa y la esperanza. Por duras y difíciles que sean las circunstancias que nos rodean, no hay que darse por vencidos ni aún vencidos.