El inglés no es fácil, y además duele. Pero si se toma a pequeñísimas dosis ni se nota. Esto que tienes entre manos es un dietario para el año 2016, un año en el que es posible que aprendas inglés. Sí, inglés, tú. Créetelo. En cada semana encontrarás una pequeña lección ilustrada, para que, mientras anotas tus quehaceres y ordenas tu día a día, aprendas la lengua de Shakespeare casi sin enterarte.