¿Qué es la verguenza para un hombre
que desea simplemente
que el cuarto en que pasó su infancia
sea ocupado por un niño mejor?
Ellos decían, verguenza sólo para hacer cosas malas.
Verguenza sólo para morir
por los que no tienen tu sangre.
Verguenza los cristales rotos
que coronaban el muro del colegio
para que los niños no viesen el mundo.
Cada vez que alguien me dice
eres una verguenza para tu familia
algo en mi cuerpo encuentra su lugar.
Génesis, de Pablo Fidalgo Lareo.