La cuestión palpitante es, quizá, uno de los acercamientos ensayísticos más serios planteados ante la cuestión de la novela naturalista. Publicado por entregas en el periódico La Época a lo largo de 1882, plantea el enfoque personal de la autora sobre esa suerte de corriente o estilo literario que había alcanzado su cénit en Francia con las obras de Emile Zola y que en España estaba vista con cierto desprecio, tildándola de vulgar y muy contraria a los preceptos imperantes del catolicismo. Precisamente en esos ataques y en la adaptación personal que hizo la Pardo Bazán del Naturalismo, reside la importancia de este libro, donde podemos vislumbrar la agudeza de la autora a la hora de defender y atacar a autores y sus obras, además de responder al machismo reinante entre sus coetáneos.
