MEJUTO, EVA / MILHOES, MAFALDA
María y Benito
vivían tranquilos.
María cosía,
barría y labraba.
Benito cantaba,
dormía y soñaba.
Pero una mañana
María decide dar una lección a su marido. Astuta, y con una gran habilidad en el manejo de la retranca, logrará que Benito tome consciencia de que el trabajo de casa está mal repartido y consigue que cambie de actitud.