Olivia es uno de los personajes más encantadores que han aparecido en los últimos tiempos en los álbumes ilustrados para los niños más pequeños. Con su energía ilimitada, su amor por la belleza y su predilección por el color rojo, esta carismática cerdita creada por el artista neoyorkino Ian Falconer sedujo no sólo a los exigentes jurados de la Medalla Caldecott, que le concedió una mención de honor en el certamen del año 2001, sino también a miles de lectores chicos y grandes de diferentes latitudes. Más que un relato al ultranza, el libro presenta una sucesión de momentos y situaciones que ponen de relieve el carácter, la psicología y la conducta de un personaje deliciosamente infantil.