Rapuncel está encerrada en una torre sin puerta y con una única ventana. Por ella entra la maga que la secuestró de pequeña, trepando por las largas trenzas de la joven para llevarle su escaso sustento. Rapuncel vive de esta forma tan cruel desde que cumplió los 12 años, pero un día el hijo del rey escuchó su triste canto y la vida de la doncella cambió por completo.