Elisa está en primero de bachillerato, y su vida transcurre «sin pena ni gloria» entre su padre, que está deprimido, su extraña relación con Ricardo, el chico que le gusta, y su hermana menor Carmen, que la chantajea para que le haga un trabajo de literatura sobre Lope de Vega. En la biblioteca del instituto, Elisa se topa con una luz extraña: es un fantasma tuerto sobre el que pesa una terrible maldición: no recordar absolutamente nada. Tras su incredulidad inicial, Elisa, a quien el fantasma llama Belisa, rastreará en los textos de Lope para encontrar su nombre.